Pequeñas locuras, o un maldito punteo de lo tal vez venga...

Que es ser loco, no somos acaso todos en cierta medida dementes, y no me refiero al termino medico no nada por el estilo, sino que trato de referirme al hecho de cometer locuras y dejarnos llevar por nuestros instintos.
Siempre he defendido el poder de nuestros sentidos menos usados, como el instinto, la percepción y todas aquellas habilidades que generalmente llamamos sexto sentido. Usamos la decima parte de nuestro cerebro, he incluso me atrevería a decir que tal vez algunos usemos menos, con lo gastado que esta nuestra mente con toda la basura que consumimos, ya sea mental y/o biológicamente hablando.
Pero volviendo a lo que trataba de decir en un principio, alguna vez han tratado de seguir sus sueños o motivaciones más poco ortodoxos. Me refiero a esas locuras que a veces pasan por nuestra mente como si fueran un rayo de luz que se corta a medio camino, alguna vez cuando era menor creí haber escuchado que las ideas y los pensamientos eran rayos de luz que llegaban a nuestra mente, de ahí la idea de que las locuras son mensajes a medias, pero no está aquí la gracia del asunto.
No seriamos mucho mas graciosos si nos dejásemos llevar por nuestras ideas incompletas, claro, algunas veces seria para peor y podríamos salir dañados, pero no es la adrenalina uno de los más grandes estimuladores que existen.
Creo que poco a poco nos hemos puesto sedentarios en todo sentido, cada vez las cosas se nos hacen más latosas y aburridas; y en vez de buscar una manera más entretenida para resolverlas, buscamos siempre la manera más rápida y en la cual no tengas casi nunca participación. O muy por el contrario, generamos una mucho más participativa y a la vez menos sana por decirlo de algún modo.
Imaginen que tan solo el hecho de estar frente a mi pantalla escribiendo esto me separa del grupo, de la masa, y aunque prefiero ser una persona solitaria, no puedo abstraerme por completo de la sociedad. La idea del ostracismo o la de ser un anacoreta citadino no se me dan, lamentablemente progresivamente me he dado cuenta que esta vendría siendo la única solución que existe, me refiero a que si la gran barrera que nos impide avanzar en todo sentido de la palabra es la mala comunicación, y con la mano en el corazón, no creo que esta mejore, la solución alternativa es cortar la comunicación, y alejarse.
Como ven este sería un caso tipo para ejemplificar la idea de seguir una idea incompleta, es decir que en vez de que el mensaje llegara completo, disocie la idea en cortar la comunicación por completo, es decir que siguiendo esa línea debería decir que es este mi último escrito.
Y como ultimo escrito debería cumplir la difícil tarea de comunicar todo, como para dejar todo trazado y no tener que volver a escribir, y abrir de esa forma la comunicación nuevamente.
Entonces comencemos, es decir escribamos el principio del fin:
• Me caen mal los que respetan por miedo
• Me caen bien los que se hacen respetar por miedo
• No creo en la economía, mucho menos en los economistas
• Alguna vez pensé en ser gay, lo deseche por la clara atracción que siento con el sexo opuesto( obviamente escribí esto para ver que tan pendientes están a lo que estoy escribiendo )
• Odio a los filósofos, en especial a los que creen en dioses y santos, nadie está libre
• Me gusta rascarme mi aparato reproductor y mis genitales, tenía pensado escribir algo para explicar el porqué pero creo ya da lo mismo
• No le temo a la muerte, ni a los muertos, pero si mucho a los vivos, en especial a los que me recuerdan a mi mismo
• No me gusta bañarme, creo que muchos se abran dado cuenta
• Odio mi mano izquierda, no me sirve para rascarme, con suerte alguna vez la use para sacarme algún loco rebelde
• Cuando chico alguna vez comí loros, son ricos pero muy salados
• Más de una vez me han dado ganas de matar a cualquier persona que se me atraviese, sin tener razón alguna, creo que forma parte de mi esquizofrenia, la cual nunca medique porque nunca me trate ni vi doctor alguno
• No creo en la medicina, el que tiene que morir que muera, por mucho que extrañe a gente que no llegue a conocer o tal vez conocí mucho
• Por alguna extraña razón, siempre me gustaron los animales extraños, ojala alguien me regale una mascota extraterrestre algún día. Sería la persona más feliz de la tierra
• Me gusta imaginar peleas, observar peleas, generar peleas y por sobre todo no pelear, desarmado
• Siempre he creído que soy superior al resto, aun mas cuando creo en la horizontalidad de capacidades y habilidades
• Odio a los flaites, aunque me consideren uno de ellos, ya lo dije, soy superior
• Siempre he creído que la vida en igual que hacer un documento en Word, es decir copiar-pegar-editar, en todo sentido, no siempre en ese mismo orden
• Aborrezco la cultura general, existe solo cultura, si fuera general no existirían brechas en la educación, por lo menos en la base
• No creo en el poder de la familia, si en la amistad
• No tengo amigos en mi familia
• El tacto y el gusto son los mejores sentidos a la hora de tener sexo, los sigue muy de cerca el olfato, la vista y el oído están de más, sino pregúntenle a los ciegos y sordos que tal el sexo, además no se que tanto importa si la mayoría de las veces lo hacemos a luz apagada y bajo las tapas, tratando de meter el menor ruido posible, para que no escuchen los vecinos o nuestros padres
• Prefiero el frio al calor
• La noche debería ser para trabajar y el día para dormir, o era al revés
• Los mejores lugares para hacer el amor son la cama y las alfombras, el sexo se puede tener donde se nos dé la gana, menos en un campo de rosas, cactus o algo por el estilo
• Si no fuera porque les tengo temor, mataría a todos los gatos, si me preguntan el porqué les respondería que por celos, difícil de explicar
• Nunca me acuerdo de mis sueños al despertar, pero todos los días tengo deja vus
• Nunca he tenido sexo, siempre he hecho el amor, jajajaj
• Si me lo preguntan el comics es mejor que el cine, pero no que la literatura, la música va tercera
• La marihuana no hace mal, sino véanme a mí, soy la persona más racional que conozco, obvio, si no fumo hace años, se nota a o no
• Me cargan los punteos, en especial si son de ideas y no se desarrollan, demuestran flojera o un total desinterés en comunicarse

En fin, creo que eso seria, y no crean que en verdad dejare de escribir, todo esto solo fue una pequeña locura que me quise dar, nos vemos, malditos iletra

Pequeño fragmento vacio

Soy un idiota lo sé, tengo de todo pero siempre pierdo lo que más me interesa, podría ser el mejor en todo lo que me proponga, pero por la maldita gracia de dios, soy yo y no hay nada que me motive el tiempo suficiente para lograr mi máximo.
No me puedo quejar por la vida que he tenido, a mis cortos años podría incluso decir que he pasado por cosas que personas del doble de mi edad no han pasado y no pasaran jamás. Pero lamentablemente no siempre se aprende de los errores, doy fe de eso. Y aunque igual me he puesto de pie más de una vez, como que cada vez me cuesta más, debe ser por el hecho que probablemente este cavando más y más profundo, pero viéndolo por el lado amable quizás llegue a china...
Como dije antes tengo de todo, no a destajo, pero tengo lo suficiente para vivir, pero aun así creo que me falta algo, es como si una pequeña parte de mi reusara madurar o muy por el contrario ya se haya jubilado, nunca me he proyectado, en ningún sentido de la palabra, no sé qué va a ser de mi vida en una semana más, tampoco ando gritando carpe diem todo el día, pero algo me falta, para establecerme.
Tengo muchos amigos, unos pocos de verdad, los podría contar con los dedos de la mano, y me sobrarían dedos para limpiarme la nariz y sostener un cigarro. Bueno tal vez exagero un poco y son un poco más, nunca más de 10, el resto son amigos, incluso algunos cayendo en el rango de conocidos y ubicados.
Mi familia es la mejor que me podría haber tocado, son geniales, tanto que a veces no están ni ahí conmigo, lo que se agradece, mi libertad termina donde comienza la suya, que mejor, igual agradezco cuando pasa todo lo contrario, y andan detrás mío como un fox terrier persiguiendo a un zorro, animal con el cual me identifico plenamente. El petiso de mi hermano es un caso aparte, desborda cariño hasta por las orejas, al punto que se hace insoportable y dan ganas de patearlo lejos, en el buen sentido de la palabra. Todo el resto de la familia, ya sean tíos, primos, abuelos y el resto de la manada, están bien, salvo contadas excepciones que no superan los diez.
Por la plata no me preocupo, no creo en el concepto del dinero, lo uso poco menos porque me veo en la obligación de hacerlo, creo en el concepto de propiedad, pero a veces no lo respeto, asocio esto a lo trabajado-ganado. Aunque si fuera por eso ahí si que tendría un serio problema económico.
Sentimentalmente hablando tampoco puedo quejarme, no me proyecto y fin, lo malo es que cuando lo hago siempre termino dejando más destrozos que si un huracán estuviese pasando mientras un terremoto genera un tsunami a las faldas de un volcán en erupción, en otras palabras queda la caga más uno.
En fin, y como para ir resumiendo, soy especial, a tal grado que aun no logro encontrar mi especialidad, pero cuando la encuentre y logre llenar ese sensación de vació que me agobia de cuando en vez, lo único que les puedo decir es preocúpense, por que no tendré limites...

Recuerdos a las 5 de la mañana

Camino, afirmándome por la reja cuando miro el reloj, 5:34. A tientas busco las llaves de mi casa, deben de estar en alguno de mis bolsillos, o se habrán ido entre tus ropas tiempo atrás, no, acá están, abro, con cuidado, guiando la llave con mis dedos mientras el celular cumple función de linterna. Ahora me enfrento a la puerta principal, con sus dos chapas, y yo sosteniendo con suerte aquel manojo de llaves, entre las cuales con algo de suerte diferencio entre las de tu casa y la mía.
Por un instante recuerdo esos días en que llegaba a tu casa, sobrio, contigo a mi lado, guardando su debido silencio para no despertar a tus padres, recuerdo caminar por ese pasillo eterno, llegar al fondo, a tu pieza, ocultarme por un rato mientras tu madre recién salida de la cama llegaba a ver como estabas, recuerdo esas veces en que despertaba más conversadora que de costumbre y en vez de estar soportando el frio del suelo por 5 minutos me quedaba en silencio durante 30 minutos, minutos en los cuales mi adrenalina fluía por doquier, minutos en los que a veces la espera era tan eterna que cuando tu madre se marchaba tenias que despertarme con un beso, recuerdos, recuerdos; y heme aquí, tratando de entrar, solo y ebrio a mi casa.
Ya cuando logro entrar, trato de encender alguna luz, pero demonios, aun no me acostumbro a esta casa, choco contra todo lo que no debía chocar, tiro todo lo que no debía tirar, me enojo por todo lo que no me debía enojar, luego al final encuentro el interruptor, enciendo la luz y saludo, no se a quien, nadie me espera, así es mi vida, solo, quizás por cuánto tiempo más.
Llego a mi cama y me lanzo al vacio, son solo decimas de segundos cayendo, pero para mí es casi un año de recuerdos, recuerdos, pasan por mi vista todas esas veces que me lance sobre ti, jugando al gato y al ratón y viceversa, recuerdos de esas veces que compartíamos algo más que la cama, y nuestros sueños se fusionaban durante la noche, trato de abrazar a alguien pero no encuentro más que una almohada manchada por mi saliva que cae al dormir y soñar contigo, tus amigas siempre dijeron que era un baboso y tal vez estaban en lo cierto.
Empiezo a desvestirme, no muy sutilmente, me saco todo junto, chaqueta, camisa y camiseta salen totalmente arrugadas y pasadas a humo, no como antes en que desvestirnos era un ritual que compartíamos juntos, donde cada ropa que nos sacábamos era como si estuviéramos retirando los pétalos de una flor. Al final termino de sacarme mis pantalones y mi celular, el cual no recuerdo en qué momento volví a guardar cae y se enciende la pantalla, y como si yo no lo supiera vuelvo a ver la foto en la que salimos abrazados, una que tomamos en nuestras vacaciones. Y cuando la veo, algo recorre mi espalda, me siento mejor, es como si la maldita borrachera hubiese sido exorcizada de mi cuerpo, me agacho, tomo mi celular, comienzo a escribirte un mensaje, y aunque me siento sobrio, no sé muy bien lo que escribo, solo me dejo llevar, escribiendo los recuerdos que tengo de ti a las 5 de la mañana… Y cualquier cosa que haya escrito, te aseguro que no me arrepentiré.